La Waters Foundation ha desarrollado un conjunto de 14 hábitos del pensador sistémico que, en su conjunto, representen la competencia de pensamiento sistémico (vea un video que muestra sus impactos en los Objetivos Fundamentales Transversales):
- Intenta entender la “película completa”
- Observa cómo los elementos en un sistema cambian a través del tiempo, generando patrones y tendencias
- Reconoce que la estructura de un sistema genera su comportamiento
- Identifica la naturaleza circular de relaciones complejas entre causa y efecto
- Hace conexiones significativas dentro y entre sistemas
- Cambia la perspectiva para aumentar la comprensión
- Reconoce y prueba suposiciones
- Considera un tema completamente y resiste al impulso de llegar a una conclusión rápida
- Considera cómo los modelos mentales afectan la realidad actual y el futuro
- Usa la comprensión de la estructura de un sistema para identificar posibles acciones de efecto palanca
- Considera las consecuencias a corto plazo, a largo plazo, e inesperadas de las acciones
- Presta atención a las acumulaciones y sus tasas de cambio (flujos)
- Reconoce los impactos de las demoras cuando se están explorando las relaciones de causa a efecto
- Examina los resultados y cambia las acciones si es necesario: “aproximación sucesiva”